Tras una operación contra un grupo que vende teléfonos robados en São Paulo, la policía brasileña logró recuperar más de 8 mil smartphones.
La operación de la Policía Civil, apodada Big Mobile, comenzó después de un levantamiento de información de las víctimas que habían hecho denuncias de robo de sus teléfonos móviles.
La policía inspeccionó cientos de establecimientos en la zona central de São Paulo, enfocándose en tiendas de reparación y asistencia técnica.
Unos 500 policías participaron en la operación y visitaron los lugares utilizando el monitoreo en tiempo real de la ubicación de los smartphones, lo que los condujo a los destinos finales de los dispositivos robados.
Después de incautar más de 8 mil teléfonos robados, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) anunció que creará un equipo de trabajo para localizar y devolver los teléfonos a sus propietarios.
“Vamos a ampliar el alcance de esta operación, continuaremos analizando tanto las organizaciones criminales como saber si estos teléfonos participaron en algún otro delito, para que podamos llegar a la raíz del problema”, dijo Artur Dian, director general de la Policía Civil.
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